AVISO: Es real
Todo fue muy extraño cuando llegué allí...
Miré a un lado y a otro y todo estaba intacto.
Observé las fotos que estaban en el mismo lugar de siempre, pues todo me parecía perfecto.
Me aproximé a abrir la primera puerta.
Aquella habitación no parecía tan perfecta, ya que allí se hallaba el mantel a cuadros, con algunos platos de la última cena.
Salí de la habitación y fui directa a la habitación más importante, la mía.
Al abrir la puerta, me llegó un olor familiar.
Un olor que te llevaba al pasado, a aquellos recuerdos de la infancia que allí se encontraban.
El primer olor me llevó a principios de la obra de la casa.
Yo estaba muy contenta, pues parecía la casa ideal.
El segundo olor, era algo menos marcado, pero aún así era un recuerdo importante.
Me hizo recordar aquellas tardes sin Internet, aunque no menos felices, jugando a mi juego favorito.
El tercer y último olor me llegó muy borroso y sin apenas contenido.
Pero para mí tuvo la misma importancia, porque trataba de aquellas tardes con ella.
Las dos solas lo pasábamos genial; a veces riñas y a veces risas. Pero cada una de ellas marcaron mi vida.
Ganas de llorar era lo que sentía en ese instante, cuando todos esos recuerdos se juntaron, para hacerme recordar.